¿Beber vino tinto adelgaza? Sí. La respuesta puede parecer sorprendente, pero científicos de la Universidad de Purdue, en Indiana (Estados Unidos), han desarrollado un estudio en el que se demuestra que un compuesto del vino tino ayuda a reducir el peso.
Se trata del piceatannol, un antioxidante similar en estructura al resveratrol. Los científicos de la universidad norteamericana descubrieron en 2012 que este compuesto es capaz de bloquear los procesos celulares que permiten el desarrollo de las células grasas. Desde entonces, se han abierto nuevas vías de investigación para el control de la obesidad centradas en el este compuesto existente en el vino tinto.
La idea es utilizar el piceatannol para retrasar la generación de células adiposas, así como para impedir el crecimiento y desarrollo de las que ya están formadas. Se estima que ingerir una copa de vino al día reduce hasta en un 30% las probabilidades de padecer obesidad, y la causa sería la acción del piceatannol.
Además de ser beneficioso para prevenir la obesidad, el consumo moderado de vino tinto tiene otros beneficios para la salud. Los flavonoides, moléculas antioxidantes igualmente presentes en el vino tinto, ayudarían a protegernos contra las enfermedades cardiovasculares, especialmente contra los infartos de miocardio y la ateroesclerosis (endurecimiento de las arterias por depósitos de placas de colesterol). Numerosos estudios demuestran que la ingesta de un vaso de vino tinto al día reduce considerablemente la posibilidad de sufrir este tipo de dolencias.
Por supuesto, estos estudios destacan que el excesivo consumo de vino al día produce muchos más perjuicios que beneficios. Así que… ¿vino tinto? Sí. ¿Todos los días? Sí. ¿Una o dos copas? Sí. ¿Abusar del vino? Nunca.
Fuente: www.dehesadelcarrizal.com