De manera general, se puede decir que la comida típica de Egipto refleja una mezcla de influencias, dada su historia y posición geográfica. Desde el norte, la dieta mediterránea ha dejado cierta huella. Desde el sur, la gastronomía africana se hace sentir en algunas propuestas. Y el largo periodo de dominación otomana también ha calado hondo en los platos. Todo ello sujeto a los usos y costumbres del Islam, especialmente en lo que a alimentos permitidos se refiere.
Otra característica que se puede destacar de la comida típica de Egipto es el gran peso de las verduras en la dieta. Esto se debe, en buena medida, al alto precio que tradicionalmente ha tenido la carne, usada sobre todo en estofados, picada o mezclada precisamente con verduras.
El pescado, por su parte, se emplea pero no domina la dieta de los ciudadanos de Egipto. En la gastronomía de la época faraónica, al menú diario sí llegaban las las capturas del río Nilo, pero esto es ahora más bien testimonial, pese a que algunas propuestas son deliciosas, como la tilapia del Lago Nasser. Solo en la costa mediterránea y la costa del Mar Rojo, en ciudades como Alejandría o en Sharm El Sheij, el pescado y el marisco están plenamente arraigados en la alimentación de sus ciudadanos.
Por último, también cabe decir que en Egipto, la gastronomía se disfruta sin excesos, pues los egipcios no tienen por costumbre ingerir grandes cantidades de comida cuando se sientan a la mesa. Hay varias razones que se suelen dar para explicar esta frugalidad, y algunas se remontan a mucho tiempo atrás. Por ejemplo, el hecho de que, en el Antiguo Egipto, buena parte del alimento disponible se dedicaba a alimentar el ka de los difuntos, como ha quedado demostrado en hallazgos de numerosas tumbas de aquel periodo.
Otras razones, en cambio, son más ‘mundanas’ y actuales. Por ejemplo, el propio clima del desierto no incita a grandes empachos, como puede corroborar cualquier persona que viva en lugares con acusada diferencia entre invierno y verano: en esta última estación, el organismo no necesita tanta energía para producir calor, de modo que demanda menos comida, reduciéndose el apetito.
Alimentos e ingredientes de la gastronomía egipcia
Como decíamos, las verduras y las legumbres son auténticos protagonistas en la comida típica de Egipto. En su gastronomía se usan mucho las alubias o habas, que se cocinan de muy variadas formas: guisadas, asadas, en puré, aliñadas, en sopa, etc. Las berenjenas y los pimientos también son muy populares, así como el tomate, el pepino y otras verduras propias de ensaladas.
Por otro lado, los cereales se usan de manera generalizada, en especial el arroz, empleado como guarnición en múltiples platos. El trigo es otro ingrediente fundamental en la dieta de los ciudadanos de Egipto: en la gastronomía de este país encontramos muchas variedades de pan, que resulta prácticamente imprescindible en cualquier menú.
La fruta también ocupa un lugar destacado en la comida típica de Egipto, en especial los cítricos. Una forma muy habitual de consumirla es en forma de zumo, como describimos más abajo. El aceite de oliva, por su parte, es una opción habitual para aliñar ensaladas y realizar frituras.
Por lo que respecta a la carne, el cordero y la ternera se imponen en una dieta en la que el cerdo no tiene cabida, por precepto islámico. El pollo es el ave más consumido, aunque en este punto cabe citar la importancia del pichón, a menudo en asados rellenos de, cómo no, verduras y arroz.
En los lugares en los que el pescado y el marisco tienen mucha disponibilidad, las especies que llegan al plato son variadas. En el Mediterráneo, los calamares, las gambas, el mújol, la lubina o la dorada están entre los más habituales. Y en el Mar Rojo, la langosta es una de sus propuestas más destacadas.
Platos típicos de Egipto
Si durante tu viaje tienes pensado degustar diferentes especialidades de la comida típica de Egipto, aquí va una serie de propuestas que no puedes pasar por alto:
- Fuul medames: alubias cocidas y trituradas en puré, que se come dentro de pan de pita. En una versión más sofisticada, se puede servir con rodajas de huevo cocido y las alubias pueden estar aderezadas con pimienta y comino
- Taamiyya: se puede considerar la versión egipcia del falafel, una empanada que en este caso es de alubias blancas
- Warak Enab: un singular rollito hecho con hojas de parra y relleno de carne, arroz, tomate y cebolla, aderezadas con albahaca y canela
- Kofta: carne picada en pasta y asada, con sabor picante y presentada en brocheta
- Kushari: considerado uno de los platos nacionales del país. Lleva pasta (normalmente macarrones), arroz, garbanzos, lentejas, ajo, vinagre y salsa de tomate especiada
- Molokhiyya: sopa a base de hojas de yute, lo que le da su característico color verde y su textura gelatinosa
- Shurbat ads: sopa de lentejas que se sirve con limón y comino
- Fesikh: digno representante de los salazones tradicionales del Mediterráneo, que en este caso gusta mucho a los coptos. Se elabora con mújol y se suele comer para la fiesta de Sham El Nessim, el día después de la Pascua cristiana oriental
Además de estos platos típicos de Egipto, hay otros muchos que son comunes a países vecinos pero, no por ello, son menos populares. Destaca el kebab, es decir, el cordero en brocheta y asado en llama. O el tabouleh, una ensalada muy común en Egipto y en la gastronomía de Oriente Próximo en general: entre los ingredientes más habituales de esta ensalada están el perejil, el tomate, el limón, el ajo, las semillas de sésamo y el bulgur, que son granos de trigo cocidos, parecidos al cuscús
Dulces y postres típicos en Egipto
En Egipto, la gastronomía le hace un hueco muy importante a los dulces y los postres, que rara vez faltan al final de una comida. Destacan la ruz bi laban, un pudin de arroz, y la mahallabiye, que es un tipo de natillas con almendras y piñones. En realidad, los frutos secos son muy habituales en otras propuestas dulces, como por ejemplo la baklava, que es un pastel de diversas capas de pasta filo, parecida al hojaldre, y rellenas de nueces y pistachos, con abundante sirope. La konafa, muy habitual durante el Ramadán, es otra propuesta dulce a degustar: pasta muy fina y enrollada, que va rellena de crema, queso tierno y frutos secos.
Bebidas típicas de Egipto
Las bebidas favoritas de los egipcios son el té árabe y el café, que más allá del placer que proporciona su sabor, forman parte de un hábito de cortesía y hospitalidad en situaciones tan variadas como una reunión o un regateo en el zoco. El té recibe el nombre de shai y puede servirse con hojas que quedan como posos al fondo de la taza o bien en bolsita, al estilo inglés. Al café, en cambio, se le llama ahwa en árabe y también es conocido como café turco: espeso y en taza pequeña, con un fuerte poso al fondo.
En el plano de las infusiones también se puede citar el carcade, con hojas de hibisco, que se puede tomar con hielo en verano o caliente en los momentos más frescos del invierno. Otra bebida típica de Egipto es el sahlab, a base de leche y enriquecida con polvos o trozos de tubérculos secos, así como frutos secos y canela.
Como decíamos más arriba, los zumos son una de las bebidas preferidas de egipcios y de turistas sedientos. La variedad de propuestas hará las delicias de los amantes de la fruta exprimida, pues en los numerosos establecimientos a pie de calle es fácil encontrarlos de plátano, guayaba, mango, granada, fresa o naranja, entre otros muchos.
Como ocurre en el resto de países musulmanes, las bebidas alcohólicas no están permitidas, aunque en los establecimientos orientados al turista sí se pueden encontrar, en especial cervezas. No obstante, está muy mal visto hacerlo por la calle o mostrar síntomas de embriaguez.
Fuente: www.egiptoexclusivo.com